Santander - 28.10.2016

El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha agradecido la "excepcional" labor que Javier Gandarillas ha desarrollado durante sus 45 años como secretario general de la Hermandad de Donantes de Sangre de Cantabria, colectivo al que ha expresado "un cariño especial".

Ha destacado el papel de Gandarillas en la promoción de la donación altruista de sangre, consiguiendo que la Hermandad de Cantabria ocupe cada año los primeros lugares de España en donación de hemoderivados.

También se ha referido a la solidaridad de todos los donantes, asegurando que "no hay mayor generosidad que ser donante". En este sentido ha animado a toda la sociedad a convertirse en donante, tanto de sangre como de órganos.

Revilla, junto a la consejera de Sanidad, María Luisa Real, ha asistido a la comida homenaje celebrada en el Hotel Santemar para reconocer el trabajo y dedicación de Javier Gandarillas como secretario de la Hermandad de Donantes de Sangre de Cantabria

Por su parte, María Luisa Real, también ha señalado la labor realizada por Javier Gandarillas para promocionar la donación altruista de sangre y la autosuficiencia de Cantabria en sus necesidades de hemoderivados, resaltando que "se trata de una figura insustituible que ha contribuido de forma decisiva a mejorar la salud de todos los cántabros". 

Ha resaltado "su entusiasmo, ilusión y vitalidad". "Poder de convicción, accesibilidad y constancia" han sido otros términos utilizados por María Luisa Real para definir a Javier Gandarillas y su labor profesional.

La consejera de Sanidad ha recordado el legado que deja tras 45 años de actividad en la Hermandad de Donantes de Sangre de Cantabria y que ha resumido en la consolidación de la donación altruista de sangre, la consecución de un alto índice de donaciones y la autosuficiencia de Cantabria en sus necesidades de hemoderivados.

Además de agradecer personalmente el trabajo desarrollado durante su vida profesional, María Luisa Real ha concluido que el mejor homenaje que se puede hacer a Javier Gandarillas "es mantener y desarrollar el espíritu de la donación altruista de sangre y de la generosidad que este gesto supone".